La diabetes se ha convertido en un problema de salud pública. En España el 13,8 por ciento de la población tiene diabetes, aunque prácticamente la mitad lo desconocen. El aspecto positivo es que aunque estamos ante una enfermedad crónica puede tratarse y prevenirse. El primer paso para conseguirlo es llevar un adecuado control glucémico y vigilar la alimentación.
¿Significa eso que los diabéticos tienen que seguir una dieta imposible llena de restricciones? Todo lo contrario. “La recomendación para el diabético es la que deberíamos seguir todos: una dieta saludable bajo el patrón de la dieta mediterránea”, afirma Susana Monereo, secretaria de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Seedo) y jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid. “La diferencia de la dieta del diabético con la de cualquier otra persona es que debe ser muy ordenada. Otra persona puede no comer y saltarse una comida, un diabético no. Tiene que ser muy ordenado con la comida, no saltárselas, no comer a deshoras ni por lo noche”, advierte.
La especialista indica que la dieta del diabético es el paradigma de la dieta saludable: rica en alimentos vegetales y frutas, en la que el paciente coma pescado por encima de la carne y cuando come esta última que sea baja en grasa o se limite a proteínas de alto valor biológico con poca grasa. Respecto a los azúcares, la indicación es sacarlos de la dieta, al igual que los carbohidratos de absorción rápida. Si los contienen será de forma excepcional. “Ese plan saludable debe contener hidratos de absorción lenta repartidos a lo largo del día y restringir las grasas saturadas lo máximo posible”, advierte.
Claves para el día a día
Monereo da una serie de consejos prácticos que se pueden aplicar diariamente para controlar la diabetes:
Compra
La compra es el origen de una buena alimentación. La primera indicación a la hora de hacerla es leer las etiquetas porque aunque sean confusas aportan información.
La experta recomienda evitar los azúcares, la glucosa y la sacarosa. “Deben acordarse de que el 50 por ciento de los alimentos que comen al día deben ser de origen vegetal. Hay que intentar comprar productos frescos, de temporada”, añade.
Número de comidas
Lo conveniente es repartir la comida en 4 o 5 tomas. Respecto a la cantidad, ésta dependerá de otros factores, concretamente de si el diabético tiene obesidad o sobrepeso.
“Deberá restringirse cuando tiene exceso de peso porque tendrá que reducir las calorías y adelgazar”, señala Monereo. “Por otro lado, los diabéticos tendrán que medir las raciones de hidratos de carbono en relación a la insulina que se ponen, es decir, deberán saber cuántas raciones de carbohidratos tienen que comer para ponerse la insulina”.
Atención al azúcar
El control de la glucosa en el diabético es clave y por eso debe prestar especial atención a algunos alimentos que pueden desestabilizar los niveles de la misma. Estos alimentos son todos los que contengan azúcares de absorción rápida, glucosa y sacarosa.
“Sabemos que la fructosa es un azúcar considerado bueno para los diabéticos pero no es recomendable su consumo. La razón es que aunque no se convierte en glucosa, sí lo hace en triglicéridos, que son perjudiciales para la salud”.
Respecto a los edulcorantes, cuanto menos mejor. El motivo que da la especialista es que el sabor dulce hace que la comida sea más atractiva y, por tanto, comemos más.
Para evitar esos picos de glucosa en sangre que se producen después de comer dulce los diabéticos deben utilizar edulcorantes artificiales, el que más les guste, en cantidades pequeñas.
Cuida tu peso
Un aspecto que reitera es la vigilancia sobre el peso. Hoy en día ha aumentado la facilidad con la que engordamos debido a la disponibilidad de alimentos muy calóricos que tenemos. El diabético tiene que vigilar especialmente todos los alimentos de alta densidad calórica, como por ejemplo, los alimentos precocinados, el chocolate, los donuts. No se trata de que contengan azúcar, además tienen muchas calorías.
No al alcohol
Otro tema importante en los diabéticos es el alcohol. “Aparte de la toxicidad que tiene en cualquier persona, en el diabético es peor. Primero, le aporta muchísimas calorías; en segundo lugar, hay muchos alcoholes dulces que tienen mucha azúcar, como por ejemplo los chupitos, que no lo debe tomar, y por último, especialmente en los diabéticos tipo 1, les puede provocar hipoglucemias”, advierte Monereo. “Por lo tanto, el alcohol se debe tomar con mucho cuidado, con mucha moderación y evitando siempre alcoholes dulces y tomarlo en ayunas, siempre deben tomarlo con comida”.
Productos para diabéticos
En muchos establecimientos tienen productos para diabéticos pero la experta señala que ella no es partidaria de comerlos ya que muchas veces no sabemos qué contienen. Además, estos productos suelen ser ricos en fructosa y, aunque no tienen azúcar sí aportan calorías de grasas o de otros nutrientes.
“Es preferible que coman un trozo de turrón normal, en lugar de un turrón para diabéticos, que ajusten la insulina y reduzcan el resto de calorías de ese día. La clave está en comer de forma ordenada”, concluye.
